¡Qué te calles, Karmele!

"¿Por qué no te callas?". Con esta frase al más puro estilo tombolero el Rey, por primera vez en la historia, ha dejado completamente absorta a España entera. En las televisiones, en los periódicos y en la calle no se habla de otra cosa. El Rey nos tenía acostumbrados a sus reiteradas siestas en los actos públicos, pero no a esta salida de madre a "lo guiñol". La escena n veces repetida en todas las televisiones más bien pareciera un extracto de algún programa rosa o tertulia política de los que inundan la televisión de nuestros días, que una cumbre de jefes de estado y presidentes de gobierno. Aunque en los medios de comunicación todo son las habituales y predecibles alabanzas a la postura del Rey, a mi la conducta de mandar callar a otro me parece impropia de un jefe de estado, máxime si éste posee tratamiento de Alteza Real. Con esto no quiero decir que el histriónico Chávez no mereciera una reprobación. De él todo se puede esperar en cuanto a falta de educación. Y falta de educación, además de falta de elegancia, es lo que han mostrado los Elorriagas, Rajoys, Acebes y demás cuadros del PP al hacer oposición incluso de la defensa de su todavía líder...más escenas de guiñol...